¿Quiénes somos?

\ OBSERVATORIO SOCIAL "COLOR CUBANO"

El Programa Nacional “Color Cubano” contra el racismo y la discriminación racial fue aprobado por el Consejo de Ministros de la República de Cuba el 20 de noviembre de 2019, con un enfoque correctivo y de reconocimiento.

El 15 de septiembre de 2021 fue aprobado su enfoque integral afirmativo por el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros.

Sus principios generales son:
1. Es la plataforma de trabajo única de la Comisión Nacional, presidida por el Presidente de la República y en la que están representadas la institucionalidad estatal y la sociedad civil cubana.
2. La composición de la Comisión Nacional, hace vinculante el cumplimiento de sus objetivos a través del funcionamiento articulado intersectorial y en estrecho vínculo con el activismo social antirracista cubano e internacional.
3. Actúa como plataforma transversal, desde una lógica de 70 indicadores compartidos con todos los proyectos y programas del Plan Nacional de Desarrollo hasta el 2020 (PNDES2030).

La historia del programa se divide en dos etapas:
o Una primera, de un año y diez meses de duración con un enfoque correctivo y de reconocimiento, del 20 de noviembre de 2019 al 15 de septiembre de 2021 y,
o Una segunda etapa, con un enfoque integral afirmativo, desde el 15 de septiembre de 2021.

Los objetivos aprobados de la primera etapa fueron:
Objetivo General: Valorar los factores históricos, económicos, políticos, sociales, psicológicos y culturales que propician la presencia en la sociedad cubana actual de prácticas de discriminación racial, así como las fortalezas y oportunidades para su enfrentamiento y eliminación gradual y definitiva.

Objetivos específicos:
1. Identificar las causas que propician la vitalidad de prácticas de discriminación racial por territorios, localidades, sectores productivos y sociales.
2. Establecer una estrategia de trabajo sistémica y sistemática de atención a las prácticas de discriminación racial y racismo por territorios, localidades y sectores productivos y sociales.
3. Aprobar e implementar la Estrategia de Comunicación del Programa Nacional.
4. Fomentar el debate público organizado sobre la problemática racial, dentro de las organizaciones políticas, de masas y sociales y su presencia en los medios de comunicación social.
5. Establecer, ejecutar y divulgar el mecanismo de presentación de quejas por acciones de discriminación por color de la piel, a través de las oficinas de los niveles central y territorial de gobierno, de las de los OACE y órganos de justicia.
6. Desarrollar actividades para resaltar el legado cultural africano, los aportes de nuestros pueblos originarios, la diversidad cultural cubana, personalidades o sujetos colectivos no blancos en la historia y la cultura del país.
7. Integrarnos al movimiento internacional antirracista, de manera creadora y coherente y atendiendo a los rasgos que caracterizan el tema en Cuba.

El alcance correctivo y de reconocimiento asignaba acciones concretas a las instituciones nacionales que se consideraban con alto potencial para actuar sobre estos problemas y contribuir a su solución y presentaban deficiencias para potenciar la capacidad de modificación de las condiciones de partida que están en la base de la reproducción de desventajas que afectan a grupos específicos.

Ello hizo necesario complementar con otros enfoques y herramientas de políticas, que permiten un abordaje integral multidimensional, que actúe de forma articulada sobre los diversos factores que reproducen las desventajas vinculadas al color de la piel y en sus múltiples escalas de reproducción y expresión e incorporando herramientas proactivas de superación de situaciones de partida desventajosas para los grupos afectados.

El núcleo central del enfoque integral afirmativo es la superación de condiciones de partida desfavorables que afectan a grupos sociales específicos, trabajando en la creación de oportunidades, en canales apropiados para el acceso a ellas y en el acompañamiento personalizado, en el ciclo de vida o parte de él, para la obtención de logros y el disfrute efectivo de beneficios.
Combinación y complementación de políticas universales con aquellas de acción afirmativa.

Define objetivos orientados a la acción positiva, con capacidad transformativa, que impulsen cambios y no solo que mejoren la forma en que se gestiona la política como tal.

Para la segunda etapa, en la que nos encontramos, los objetivos se reformularon de la siguiente forma:

Objetivo General: Contribuir a la eliminación de las condiciones que generan brechas de equidad y discriminación racial asociadas al color de la piel, que colocan a las poblaciones no blancas en Cuba en situación de desventaja y vulnerabilidad con relación al acceso de bienestar.

Objetivos específicos:
1. Institucionalizar una estrategia de trabajo de atención a las prácticas de discriminación racial y superación de brechas de equidad asociadas al color de la piel por territorios, localidades y sectores productivos y sociales.
2. Mejorar la situación socioeconómica de los grupos poblacionales negros y mulatos en relación con la calidad del empleo, el nivel de ingresos, los logros educacionales, la vivienda y el hábitat, la salud y acceso a espacios de dirección.
3. Eliminar prácticas discriminatorias por color de la piel en diferentes ámbitos y planos -institucionales, interpersonales, comunicacionales-, prejuicios y estereotipos racializados.


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Observatorio Social Color Cubano. Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial (2023)